Para lograr que las empresas entiendan en qué manera puede ayudar un ERP en el desarrollo de su actividad, hay que desenmascarar estos mitos. Vamos a intentar aclarar alguna de estas ideas equivocadas sobre los ERP como Dynamics NAV (Navision).
“Los ERP solo son adecuados para grandes empresas, mucho más grandes que la mía”.
Una de las razones por las que existe tanto falso mito acerca de los ERP, es en gran parte por la falta de comprensión de qué es lo que hace un ERP como Dynamics NAV. El objetivo y propósito de un ERP es automatizar los procesos del negocio para agilizar y hacer que los diferentes departamentos trabajen de manera eficiente. La necesidad de mejorar los procesos en todas las áreas de la empresa, en lugar de en un solo departamento, es un requerimiento real hasta para las empresas más pequeñas. De este modo, las mejoras en la implementación de un ERP son aplicables a empresas de todo tamaño, no solo las más grandes.
Otro factor que lleva a considerar a empresas que son muy pequeñas para implementar un software ERP, es la gran cantidad de opciones y módulos que estos abarcan. Hablando de NAV, el ERP de Microsoft puede abarcar un gran rango de procesos. Desde inventarios, administración de almacenes, cadenas de suministros, facturación, contabilidad… lo cierto es que NAV tiene precios muy competitivos, ofreciendo una gran cantidad de opciones para el crecimiento y desarrollo de su negocio, ya que ese es otro factor a tener en cuenta: la inversión en un producto que carece de escalabilidad y no deja espacio a mejoras es un paso atrás. NAV nos proporciona un gran margen de mejora y personalización.
“La implementación de un ERP es muy costosa, en términos económicos y de tiempo”.
Un ERP puede tardar años en implantarse y es muy muy caro… o ese es el mito que se mantiene en el tiempo. En realidad, las implantaciones de soluciones ERP tales como Dynamics NAV, cada vez son más ágiles y eficientes. Si bien es cierto que, con una implantación con mucho desarrollo a medida el precio puede subir ostensiblemente, las implantaciones del producto “estándar” con meras personalizaciones son cada vez más accesibles a un mayor rango de empresas.
No hay que perder de vista el factor “ahorro” en tiempo y recursos. Una vez implantado el ERP, y con todo en marcha, todo ese proceso operativo mejorado permite invertir más en otras facetas del negocio.
Otro de los puntos que muchas veces se pierde de vista es la fiabilidad de los datos y los beneficios directos que se obtienen de usar una herramienta como NAV. Un ERP nos da una visión completamente fehaciente y veraz de la situación de la empresa, pudiendo aplicar esta información a una toma de decisiones con una base sólida con datos consolidados y fiables.
Con la ayuda de un partner con experiencia como Captology, a través del proceso de consultoría se pueden identificar procesos que obstaculizan el desarrollo de la actividad y mejorar procesos.
“No se puede uno fiar de los partners (o vendedores) de ERP”.
Lejos de querer aprovecharse del cliente, es el principal interés de cualquier partner el ser objeto de la confianza de sus clientes y convertirse en un consejero/colaborador, más que en un simple proveedor. En Captology trabajamos cada día para asegurarnos de que estamos cerca de nuestros clientes para comprender en profundidad todos sus procesos. La clave para la implementación exitosa de cualquier ERP, es encontrar el punto en el que se cumplen las necesidades de cada cliente. Al final es tan sencillo como: “se ha hecho un gran esfuerzo por ambas partes, y es deseo de Captology que el cliente saque el mayor partido posible”.
Para cualquier partner, alimentar la confianza mutua y la comprensión de las necesidades de cada cliente es esencial.